De Munich salimos muy temprano para cubrir nuestro itinerario del día, que comprende la visita a Ratisbona (Regensburg en alemán) para llegar en la tarde a Nuremberg y dormir allí.
Esta ciudad de 2000 años de antigüedad alojó en la época de los romanos una de las legiones que protegían esta zona conquistada por el imperio. En la época medieval fungió también como asiento político, siendo el sitio de reunión de los príncipes de los diferentes estados del imperio Romano-Germánico y una importante zona de comercio. Su casco antiguo, casi en su totalidad conserva los edificios originales de estilo gótico propio del medioevo, por lo cual fue declarada patrimonio de la humanidad por la Unesco.